La comunidad astronómica mundial y agencias espaciales como la NASA están en alerta máxima. Un objeto de tamaño planetario, clasificado como un «planeta errante» (un mundo que no orbita ninguna estrella), ha sido detectado ingresando a nuestro sistema solar a una velocidad sin precedentes. Su origen es desconocido y su trayectoria, por ahora, impredecible.
Vigilancia Global
Todos los telescopios importantes del mundo, desde el James Webb hasta observatorios en Chile y Hawái, han sido redirigidos para monitorear este intruso cósmico. Los primeros datos sugieren que tiene una masa varias veces superior a la de Júpiter y está compuesto principalmente de gases helados. «Es un evento único en la historia de la astronomía. Nunca hemos podido estudiar un objeto así de cerca», declaró un vocero de la NASA.
¿Existe algún Riesgo?
Aunque la probabilidad de una colisión directa con la Tierra es «casi nula», los científicos advierten que la inmensa fuerza gravitacional del planeta errante podría alterar las órbitas de cometas en el Cinturón de Kuiper o la Nube de Oort, enviándolos potencialmente hacia el interior del sistema solar. Las próximas semanas serán cruciales para determinar el verdadero nivel de riesgo que este visitante inesperado representa.