En una jornada que quedará marcada a fuego en la historia de la música argentina, Duki ha vuelto a demostrar por qué es el máximo exponente del movimiento urbano del país. El artista agotó en apenas dos horas la totalidad de las entradas para su primer show en el mítico Estadio Monumental de River Plate. La respuesta de sus fanáticos fue tan abrumadora que, para calmar la euforia y la decepción de quienes se quedaron afuera, se confirmó lo que todos pedían: habrá un segundo concierto.
El hito consolida a Mauro Ezequiel Lombardo Quiroga, conocido por todos como Duki, no solo como un artista de éxito, sino como un verdadero fenómeno de masas capaz de llenar los escenarios más grandes y emblemáticos.
Un Hito para la Música Urbana
La venta de entradas comenzó a las 10 de la mañana y fue un verdadero ciclón. La página de la ticketera colapsó por momentos ante la demanda de cientos de miles de fanáticos que buscaban asegurar su lugar. Para el mediodía, el cartel de «entradas agotadas» ya era una realidad, un logro que pocos artistas, nacionales o internacionales, pueden ostentar con semejante rapidez.
Ante este éxito sin precedentes, la productora y el artista confirmaron en la tarde del sábado la realización de una segunda fecha, desatando una nueva ola de euforia en las redes sociales.
El Templo del Rock (y ahora del Trap)
Actuar en el Estadio Monumental de River Plate es un rito de consagración. Por su césped han pasado leyendas como Soda Stereo, The Rolling Stones, U2, Madonna y, más recientemente, Taylor Swift. Que Duki, un artista surgido del under de las batallas de rap, logre llenar este «templo» no una, sino dos veces, es la prueba definitiva de que el trap argentino ha roto todas las barreras y se ha instalado como el movimiento cultural y musical más importante de su generación en la región. El propio artista, emocionado, habría publicado en sus redes: «No me entra tanta felicidad en el cuerpo. ¿Hacemos otro? SEGUNDO RIVER, VAMOS».
