En un giro inesperado y mientras la violencia en Medio Oriente no cesa, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este lunes que cree que Irán está listo para volver a la mesa de negociaciones y aseguró que se está trabajando para garantizar que la República Islámica no pueda obtener un arma nuclear.
Las declaraciones, que generaron confusión por su tono optimista en medio de la guerra, se produjeron en el marco de la cumbre del G7 en Canadá, tras una reunión a puerta cerrada con el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer.
«Irán Quiere un Acuerdo»: La Sorpresiva Declaración
«No quiero ver ninguna arma nuclear en Irán, y estamos en camino de asegurarnos de que eso suceda», afirmó Trump a los periodistas. Pero la frase que más llamó la atención fue la siguiente: «Creo que Irán está básicamente en la mesa de negociaciones. Quieren llegar a un acuerdo, y en cuanto me vaya de aquí haremos algo, pero tengo que irme. Tengo, ya saben, este compromiso», añadió de forma algo errática.
La ambigüedad de la frase «haremos algo» ha dejado a los analistas internacionales preguntándose si Trump se refería a una acción inminente o si estaba revelando la existencia de un canal de diálogo secreto del que no se tenía conocimiento. Esto contrasta con la postura oficial de Irán, que ha negado repetidamente buscar armamento nuclear.
Un Discurso que Choca con la Realidad
El tono negociador de Trump choca frontalmente con la cruda realidad en Medio Oriente. Sus palabras llegan mientras Israel e Irán continúan intercambiando ataques. Las cifras de víctimas, además, muestran la ferocidad del conflicto y la disparidad en la información.
Según las autoridades israelíes, al menos 24 personas han muerto en su territorio por los ataques iraníes desde el viernes. Por su parte, Irán denuncia que la ofensiva israelí ha dejado un saldo de al menos 224 muertos y más de 1.000 heridos en su país. En este contexto de máxima tensión, la sugerencia de una negociación inminente por parte de Trump resulta, como mínimo, desconcertante.
